miércoles, noviembre 23, 2011

Sin poder dormir

Cuatro menos 10:
Oigo el ruido de los coches en la calle.
Hace unos momento me dabas un regalo de cumpleaños: ese viejo reloj.
Hace años que no lo uso y no sé en qué cajón lo guardé.
Hace uno momento te vi llorando.
Entre sollozos mencionas frases sinceras, creo que debí prestar más atención.
No recuerdo muy bien qué decías.

Cuatro menos 5:
Miro el techo de mi habitación.
Estrellas falsas pegadas al techo
¿cuántos habrán dormido bajo ellas?
¿qué historias pueden contarme?
Hace unos momentos fui a recogerte al aeropuerto con tu padre
Recuerdo el aroma a tierra en tus ropas y esa mirada tuya.
Me hacías sentir tan invisible.

Cuatro en punto:
Sigo sin dormir.
Las estrellas falsas siguen pareciendo infinitas.
Hace un momento te vi bailando en aquel escenario.
Estabas tan llena de juventud. Y eras feliz a mi lado ¿no?
¿Juventud? Sí.
Eso que no se puede abrazar eternamente y que tiene un momento y un lugar.
¿Acaso eso eras tú?

Cuatro y 10:
Han pasado varios años.
He vivido tanto y sigo entiendo tan poco.
Soy un producto de mis muchos y deliciosos errores.
Bukowski, amigo. Ahora te entiendo.
Pero yo sigo escribiendo pésimamente y sin poder dormir

jueves, septiembre 08, 2011

La ex compañera de apartamento

Miguel sostenía la taza de café mientras le hablaba a su compañera:

-¿Y qué te dije?
-Es que ¿no te acuerdas Miguel? no me lo puedo creer.
-Recuerdo momentos, pero no detalles.
-jajaja.. fue muy gracioso
-Vamos Kitty, cuenta.
-Dijiste: solo quiero encontrar una chica que me quiera. Y luego te caiste de la cama.
-No vuelvo a beber slivovitz contigo... ni con nadie, ¡es una bebida demoniaca!
-¿Sabes? En Chequia, mis padres siempre hacen pasar la prueba del slivovitz con mis novios.
-Ya veo, ¿y alguno la ha pasado con éxito?
-mmmm... la verdad no. Nadie la ha pasado con éxito.
-Pues entonces, no me debo sentir muy mal.
-jajaja.. es cierto, pero fue my cómico.
-Si claro. Cómico fue decubrir mi camiseta rota.
-Bueno.. es que.. no sé, me provocó rompértela.
-Agradece que no era una camiseta nueva.
-jajaja... bueno, es lo que tiene pasar la noche con una checa,
-Ya veo.. iré con cuidado

Dos semanas después, Kitty se mudó de apartamento y las aventuras con Miguel terminaron. Algunas veces más ella y él se citaron para comer o tomar una copa. Nunca más se acostaron y trataron de no conversar acerca de las dos semanas antes de que ella se mudara de piso. De las dos semanas en que rompieron el tácito acuerdo en el que las relaciones íntimas entre compañeros de apartamento está prohibida. Regla que rompieron gracias a que Kitty se pensaba mudar y que aún le quedaban reservas de slivovitz en casa.

sábado, abril 02, 2011

Me perdí al encontrarme

No había una luz, no había un túnel... sólo había oscuridad y dolor. Poco a poco, estas imágenes fueron llegando  a su mente...

Hacía tres años:

-Y entonces para qué vas a Europa? preguntó Marco.
-Estuve buscando esa oportunidad tanto tiempo, que creo es un poco de inercia, y...es algo que no se puede desaprovechar.
-Sabes que Connie no estará ahí.
-Lo sé. El plan original era ir con ella, pero ¿qué voy a hacer? ¿quedarme aquí lamentándolo toda mi vida?
-Te deseo mucha suerte Miguel.
-Gracias brother.

...El vaso vacío estaba en la mesa de noche. Afuera la gente seguía viviendo sus vidas. En la habitación Miguel yacía en su cama.

Hacía un año:

-No sé que buscas, no sé que pasa en tu cabeza, pero debes solucionarlo tú solo- dijo ella
-Lo sé, no es algo de ahora. Lo llevo desde hace algún tiempo. Europa no lo ha solucionado.
-Lo siento Miguel, te quiero mucho pero ahora me das un poco de lástima.
-Esas palabras son lo último que quería oír.. es algo que no necesito.
-Está claro que a mi tampoco -dijo ella- Adiós Miguel.

...Eran como escenas de película: Fátima, Connie, su últimos años en Europa. Para Miguel cada cosa era como si hubiera sido vivida ahora mismo.

Hacia unas días:

- Grace, ¿Y no te has preguntado qué es lo que buscas?- preguntó Miguel
-No sé tío. Así soy yo.
-Me recuerdas tanto a mí (cuando soy realmente yo)- pensó él.
-¿Qué buscas en en tu móvil? -preguntó Grace
-Un número que no debo marcar.
-Que tontería ¿entonces por qué lo tienes?- preguntó élla.
-Para reconocerla si es que me llama alguna vez - respondió él.
-¡Ay Miguel! a veces me pones de mala hostia!

Hacía unas horas:

Miguel regresaba del club. La gente de siempre, el mundo de apariencias que lo agobiaba, el mismo tipo de mujer que interpreta el papel chica sexy para provocar, la otra chica que aparenta tener gustos exclusivos. La soledad de siempre. Fue al baño tomo las pastillas y se preparó un vaso de tequila...

...La combinación no fue mortal. Los sedantes y el alcohol casi lo alejan de este mundo. Miguel: ¿Cuántas paradas hay que hacer para regresar a ti?.

lunes, febrero 21, 2011

Rehaciendo pasos: Madrid

plaza castilla
Hoy camino por estas calles conocidas, por estas avenidas con rostros familiares: Plaza España, Gran Vía, Callao, Sol. El frío se filtra por entre mis ropas y trae a mi mente recuerdos no tan lejanos. Madrid tiene un significado y un aroma que el tiempo -desgraciadamente- se encargará de desvanecer. Es de los lugares que me recuerdan a tí y a las noches regresando a casa luego de unas tapas. Soy yo yendo a entrevistas de trabajo. Madrid también es un canción de Cristina Rosenvinge que no faltaba en mi Ipod. Pero principalmente Madrid eras tú. Hoy me pareció verte en el metro, pero me equivoqué; tú ya no vives aquí. Hoy me parecio verme a mi mismo, caminando hacia la Complutense, pero también me equivoqué; eso fue hace unos años, cuando soñaba con que Madrid fuera mi destino y algo más. Hoy me apetece escribir todo esto, y no hay nada que lo impida.